Evolución de la novela romántica.
Las protagonistas de la novela contemporánea trabajan fuera de casa, tienen empleos de responsabilidad, son independientes, viajan a lugares lejanos, son policías eficientes, espías misteriosas y son capaces de cualquier cosa.
Entonces si son tan diferentes, ¿qué línea las une? Por supuesto una buena historia de amor, con problemas, tropiezos y dificultades, pero con un final feliz. El amor supera todos los inconvenientes y complicaciones. Creo que por eso me gusta leerlas y escribirlas, porque no contemplan la posibilidad del fracaso.
Junto a esta pequeña reflexión ,os dejo EN EXCLUSIVA, el artículo de Merche escrito para Su sección Letras de Amor. Un nombre de lo más apropiado para el tema que nos ocupa. En esa época, empezó todo.
Hoy empezamos una nueva sección en El Alfabeto de Babel, una nueva sección que se centrará en la literatura romántica, estamos hablando de Letras de Amor y para poder inaugurarla como se debe hemos decidido comenzarla con un Clásico dentro del género romántico.
¡¿Quién no ha oído hablar de Orgullo y Prejuicio?! Tenéis que conocerla aunque sólo sea por las diferentes versiones que se han realizado de la novela en la grande o pequeña pantalla. Pero… vamos a comenzar con la novela y luego seguiremos avanzando.
[…]Es una verdad reconocida por todo el mundo que un soltero dueño de una gran fortuna siente un día u otro la necesidad de una mujer. […]
Orgullo y Prejuicio, de Jane Austen, se publicó por primera vez el 28 de enero de 1813 como una obra anónima, sin que figurara el nombre de su autora.
Una comedia romántica en la que sus protagonistas, Elizabeth Bennet y Fitzwilliam Darcy, nos trasladan a una época en la que las convecciones, la educación llevada al límite y las relaciones entre las distintas clases sociales pugnaban por ocupar un protagonismo central en la vida de cada ser humano.
Con Lizzy y Mr. Darcy nos adentramos en un clásico de la literatura romántica. Aquellos que esperen un flechazo, que con una mirada el corazón de nuestros protagonistas se derrita errarán porque tendrán que luchar, sufrir y madurar.
Lizzy dejará de lado los prejuicios que siente por Mr. Darcy, y él… Darcy, tendrá que olvidarse de su orgullo para conseguir la felicidad.
Con Jane Austen nos sumergimos en el día a día de una familia de principios del siglo XIX, la familia Bennet. Una época donde la mujer sólo tiene un objetivo, encontrar un marido, un sostén económico para muchas de ellas y así aspirar a una vida decente. La Sra. Bennet buscará que sus hijas se posicionen, consigan un esposo y así no se encuentren solas, el día de mañana.
Una época en la que la llegada de un joven soltero, con dinero, al pueblo, puede perturbar la tranquilidad de sus habitantes y todas las matriarcas se pongan en marcha con sus maquinaciones para poder cazar a su futuro yerno.
Entrará en juego Mr. Bingley, que se fijará en la hermana mayor de Lizzy, Jane, y con él, Mr. Darcy, quien conseguirá descolocar la vida de Lizzy, junto a su temperamento, saltando chispas entre los dos, pero… la atracción buscará un hueco para crecer.
[…]-He luchado en vano. Ya no quiero hacerlo. Me resulta imposible contener mis sentimientos. Permítame usted cuán ardientemente la admiro y la amo.
El asombro de Lizzy fue mayúsculo. Se ruborizó y, boquiabierta, permaneció en silencio. Esto pareció infundirle a él aún más valor, y así, prosiguió declarando lo que sentía desde hacía tiempo por ella. Pero además de los sentimientos del corazón no fue menos elocuente en el tema de la ternura que en el del orgullo. La idea que tenía respecto de la inferior condición social de Lizzy, la creencia de que al proceder así él se degradaba, los obstáculos de familia que el buen juicio había opuesto siempre a la estimación, fueron cosas en las que insistió con un valor que demostraba lo mucho que esas cosas lo afectaban, pero a la vez no resultaba adecuado para favorecer su demanda. [...]
Una novela, Orgullo y Prejuicio, con una escritura sencilla y atractiva. Una historia de amor en la que nos encontramos todos los elementos necesarios para hablar en mayúsculas del GÉNERO ROMÁNTICO: resistencia, antipatía, consciencia, una evolución madura y un fin, la explosión del amor. Elementos clásicos que siguen atrayendo a todo buen lector de romántica.
Como os he señalado más arriba esta novela fue creada en 1813, se ha reeditado muchas veces, pudiendo encontrarla de la mano de diferentes editoriales en todas las librerías, por lo que no hay excusa, si no la habéis leído tenéis que hacerlo y si ya la habéis leído por qué no releerla.
Un dato importante y clave que muestra que esta historia de amor interesa, es las veces que se ha adaptado en el cine o en la pequeña pantalla. Os dejo las más destacables:
Ø En 1938 se llevó a la televisión, en Reino Unido, primera adaptación de la novela, una versión de 55 minutos.
Ø Más Fuerte que su Orgullo (1940). Dirigida por Robert Z.Leonard; actores Laurence Oliver y Greer Garson.
Ø En 1979, una serie por la BBC, bajo la dirección de Cyril Coke, y actores protagonistas David Rintoul y Elizabeth Garvie.
Ø Orgullo y Prejuicio, serie de televisión de 1995 por la BBC. Sus actores principales Colin Firth y Jennifer Ehle. Hasta el momento es la versión mejor considerada por su adaptación.
Ø Orgullo y Prejuicio, del 2005, dirigida por Joe Wright, en la que nos encontramos a Keira Knightley y Matthew Macfadyen en la piel de Lizzy Bennet y Mr. Darcy.